La violencia vicaria es un término que, aunque no ampliamente conocido, representa una realidad devastadora para muchas víctimas indirectas de abuso. Un estudio publicado en España sobre la violencia vicaria, titulado “Violencia vicaria: un golpe irreversible contra las madres”, analizó 51 casos de asesinatos de menores dentro de una muestra de 400 causas. Este estudio reveló que en la mayoría de los casos, el agresor es el padre biológico (82%), encontrándose separado o divorciado en más de la mitad de los casos (52%).Este artículo se propone explorar en detalle qué es la violencia vicaria, sus causas principales, cómo identificarla y la importancia de buscar ayuda y terapia psicológica.
En este artículo hablamos de:
¿Qué es la Violencia Vicaria?
La violencia vicaria es el daño emocional o psicológico infligido a una persona a través del sufrimiento de un ser querido. Es una forma de abuso indirecto donde el agresor busca herir a su víctima principal causando dolor a alguien cercano a ella, como sus hijos, familiares o amigos. La violencia vicaria es una forma de abuso emocional y psicológico indirecto, ha comenzado a recibir atención en la esfera pública debido a sus impactos devastadores tanto en víctimas como en testigos indirectos.
La violencia vicaria se caracteriza principalmente por la intención del agresor de infligir daño a la víctima a través del sufrimiento de personas o seres queridos a los que esta tiene apego, como sus hijos, mascotas o familiares cercanos. Este tipo de violencia se considera una forma de violencia intrafamiliar y de maltrato infantil, ya que se ejerce de manera consciente con el objetivo de generar un daño secundario a la víctima principal, empleándose también como un mecanismo de coacción y control hacia ella
Causas y origen
El término “vicaria” proviene del latín “vicarius”, que significa sustituto. En este contexto, se refiere al uso de una persona sustituta para infligir daño o control sobre la víctima principal. La violencia se ejecuta a través de un tercero, convirtiéndolo en una herramienta de manipulación y control. Entre las principales causas de la violencia vicaria son:
- Control y poder: Un deseo de ejercer dominio total sobre la vida de la víctima.
- Venganza: Como medio para castigar a la víctima por acciones reales o percibidas.
- Celos o envidia: Sentimientos negativos hacia la felicidad o éxito de la víctima.
- Problemas psicológicos: Trastornos no tratados que llevan al abusador a comportarse de manera dañina.
¿Cómo Identificarla?
Identificar la violencia vicaria puede ser complicado, ya que a menudo se manifiesta de formas menos directas que el abuso físico. Algunas señales incluyen:
- Cambios dramáticos en el comportamiento o estado emocional de los seres queridos de la víctima.
- Relatos de actos intimidatorios o manipulativos dirigidos a terceros cercanos a la víctima.
- Evidencia de estrés o trauma en los hijos o familiares de la víctima sin una causa directa aparente.
Abordar la violencia vicaria requiere un enfoque multidisciplinar que incluya educación, legislación adecuada, y un compromiso de los medios de comunicación y la sociedad en general para fomentar el respeto y la aceptación de la diversidad, así como la intervención temprana en casos de riesgo
Buscar ayuda
Es crucial buscar ayuda si se sospecha de violencia vicaria. Algunos pasos iniciales incluyen:
- Hablar con un profesional: Un psicólogo o trabajador social puede ofrecer orientación y apoyo.
- Líneas de ayuda: Existen líneas de ayuda especializadas en violencia doméstica y abuso.
- Apoyo de seres queridos: Contar con el apoyo de amigos y familiares puede proporcionar un refugio emocional.
Terapia psicológica
La terapia psicológica juega un papel crucial en la recuperación de las víctimas de violencia vicaria. A través de la terapia, las víctimas pueden:
- Procesar el trauma: Entender y trabajar a través del trauma experimentado.
- Desarrollar resiliencia: Construir fortaleza emocional y estrategias de afrontamiento.
- Recuperar el control: Retomar el control de su vida y decisiones.
La violencia vicaria es una forma insidiosa de abuso que puede tener efectos devastadores tanto en las víctimas directas como en sus seres queridos. Identificar y entender este tipo de violencia es el primer paso hacia la recuperación. La terapia psicológica ofrece un camino hacia la sanación, ayudando a las víctimas a procesar el trauma, desarrollar resiliencia y retomar el control de sus vidas. Es fundamental buscar ayuda y apoyo para enfrentar y superar esta forma de abuso.
La violencia vicaria no debe subestimarse. Al ofrecer un entorno comprensivo y recursos adecuados, podemos apoyar a las víctimas en su camino hacia la recuperación y asegurar que encuentren la fuerza para superar las cicatrices dejadas por esta forma de abuso.