6 tips para ser un buen aliado de la comunidad LGBTQ+

Ser un buen aliado

Cada día podemos ver cómo se va progresando hacia la igualdad y justicia para las personas de la comunidad LGBTQ+. Sin embargo, aún falta mucho por hacer. Las personas de la comunidad aún se enfrentan a muchas experiencias de prejuicio, discriminación y violencia.

Parte esencial de la igualdad es el apoyo de los aliados. Aquellas personas que sin necesariamente ser parte de la comunidad, logran empatizar, y estar abiertos a aprender sobre distintos temas. Hoy te contaremos exactamente qué es ser un aliado y te brindaremos algunos tips para que puedas serlo.

¿Qué significa ser un aliado?

Un aliado es una persona que tiene una preocupación genuina por las personas de la comunidad LGBTQ+. Se caracteriza por su apoyo y aceptación, además de advocar por la igualdad de derechos y trato justo

De la misma forma, un aliado reconoce las dificultades que las personas de la comunidad atraviesan, los distintos prejuicios existentes y las experiencias de violencia que pueden experimentar. Así, reconoce que vivimos en una sociedad heterocentrista, en la cual las personas heterosexuales tienen ciertos privilegios.

Ser un aliado puede ser algo grandioso para las personas de la comunidad. Sin embargo, hay que considerar ciertos consejos para serlo. Recuerda que ser un aliado implica mirar hacia adentro, revisar de dónde venimos y estar abiertos a aprender y equivocarnos.

Tips para ser un buen aliado

  1. Estar abierto a educarnos y escuchar

Una parte esencial de ser un aliado es aprender sobre la terminología LGBTQ+ y los conceptos básicos sobre identidad y orientación sexual. Además, se trata de desarrollar una comprensión de cómo el mundo puede ver y tratar a las personas de la comunidad, y las diferentes experiencias a las que pueden estar expuestos.

  1. Revisar tus privilegios

El aceptar que tenemos privilegios, no es aceptar que no hemos tenido experiencias duras a lo largo de nuestra vida. Quiere decir, que estas experiencias duras no han tenido que ver con nuestra sexualidad. Por ello, no se refiere a lo que podemos tener, sino a las experiencias de opresión que no hemos tenido que vivir.

  1. No asumir la sexualidad de nadie

No asumas que las personas con quienes te cruzas son heterosexuales. Tampoco asumas el género o los pronombres de las personas simplemente por cómo se ven. Las personas LGBTQ+ no tienen una apariencia particular, y sus parejas previas no las definen. El no asumir abre espacio para que las personas puedan ser auténticas.

  1. Responder frente a las situaciones de injusticia

Es importante ser consistente y coherente con los valores que queremos tener y entender que las palabras importan, y las cosas que decimos se pueden quedar con las personas por años. Es necesario responder a las situaciones que no están bien, ya sean situaciones de violencia evidentes, pero también a bromas y comentarios que refuerzan estereotipos sobre la comunidad.

  1. Confrontar tus propios prejuicios y sesgos

Parte de ser un aliado es cuestionar los sesgos y estereotipos que podemos tener. Quizás los notemos en las bromas que hacemos, los pronombres que utilizamos o la manera en la que asumimos la sexualidad de las personas. 

  1. Reconocer que el lenguaje importa

Si una persona te dice sus pronombres o cómo quiere ser llamado, es importante respetarlo. Asimismo, cuando conozcas a nuevas personas trata de utilizar lenguaje inclusivo y términos neutros, por ejemplo, usar “pareja” en lugar de novio/a.

Comienza a ser un buen aliado

¿Quieres ser un buen aliado pero no sabes por dónde comenzar? ¿Te confunde la terminología? ¿Te preocupa decir algo que pueda ofender a alguien? Está bien, todos hemos estado ahí en algún momento. Lo importante es comenzar a aprender, y seguir haciéndolo, ya que es un trabajo que nunca termina. Date permiso para investigar, hacer preguntas importantes y realmente comprometerte en este proceso.

Gracias por ayudar a crear un mundo más abierto, justo y seguro para todos. Por construir un mundo en el que nadie sea vulnerado por ser quien es o por amar a quien quiera. En el que entendamos que así no pertenezcamos a la comunidad, alguien que amamos probablemente sí, y todas las personas se merecen respeto y empatía.

Referencias